
Creyeron
que los años compartidos
fueron suficientes para conocerse bien.
Se equivocaron...
Quizá se esforzaron poco,
quizá perdieron el tiempo
en buscar emociones nuevas
y vivieron cabalgando
entre la realidad y la fantasía.
Se olvidaron de intentarlo, de entregarlo todo.
Ahora, viven asombrados
de todos los rincones que tenían por descubrir.
Ahora, les urge explorarse para no perder detalle.
Ahora, el tiempo les apremia, se les hace tarde.