
CLEPSIDRA
Vuelvo a oír el llanto
inclemente de la clepsidra
tras el paso errante
de los siglos.
Veo surgir entre la arena
la estela agreste de Rosetta
rasgando los misterios
del Antiguo Egipto.
Ya las ruinas de Tebas
no son más que viento
y piedra desbastados...
Pero debo volver,
el disco de Atón florece
sobre las pálidas dunas
y un oculto sarcófago
me espera.